Los niños con TDAH tienden a cometer errores cuando en los enunciados de sus ejercicios les piden varias tareas a la vez. O bien porque pierden parte de la información, o porque lo leen impulsivamente y no reflexionan si está bien hecho.

El primer paso para ayudar a tu hijo es observar cómo analiza la información mientras lee, para ello le pondremos una ficha que contenga un enunciado con varias tareas. Le pediremos que lea el enunciado en voz alta y haga lo que se le pida. Observaremos si:

  1. Mira la tarea antes de leer.
  2. Lee de un tirón el enunciado y trata de hacer lo que recuerda.
  3. Lee de corrido el enunciado releyéndolo, después, una y otra vez para poder realizarlo.
  4. Comienza a leer y se detiene al encontrar alguna información. Realiza la tarea a medida que la va leyendo.
  5. Trabaja hablando para sí mismo en voz alta.

Todas las estrategias para comprender los enunciados de las tareas escolares son correctas, excepto la segunda. En este caso deberemos enseñarle a leer por partes.
El resto de estrategias para comprender los enunciados son las adecuadas. Las que se deben fomentar: mirar la ficha antes de comenzar y analizar la información antes de empezar la tarea; releer lo que cree no haber comprendido; segmentar por partes la tarea; y verbalizar en voz alta lo que hace, especialmente para niños impulsivos.

Los niños impulsivos no trabajan de este modo y tienden a percibir la información de forma incompleta. Tienen pocas estrategias para analizarla, por lo tanto, procesan una información incompleta y, muchas veces errónea. No son objetivos en la autoevaluación de sus resultados ni de las estrategias que emplearon, por lo tanto no aprovechan los errores para mejorar su rendimiento, sienten que obtener buenos resultados no está bajo su propio control y se desaniman y rinden con facilidad.

¿Cómo puedo ayudarle para que esto no ocurra?

Deberás enseñarle los siguientes pasos:

  1. Observar, situarse en la tarea.
  2. Leer el enunciado fragmentando la información.
  3. Comprender y realizar la tarea parte por parte.
  4. Revisar lo realizado.
  5. Autoevaluarse. Felicitarse a sí mismo por el trabajo bien realizado. Detectar en qué paso se cometió el error y tenerlo en cuenta para la próxima vez.

Nosotros debemos servirles de modelo y después será el niño el que siga el procedimiento. Se trata de que  aprenda a tomar conciencia de las estrategias para comprender los enunciados que utiliza y aprenda estrategias nuevas.

Violeta Peláez, pedagoga y terapeuta en Red Cenit Valencia