La atención, junto con la comunicación, motivación y memoria son las bases fundamentales del aprendizaje. Una deficiente capacidad de atención puede interferir en el propio aprendizaje e incluso en el rendimiento académico.

La atención se puede ver afectada como causa o de forma asociada a una serie de déficits o carencias, como por ejemplo: carencias de percepción visual, auditiva, de orden psicomotor o neurológico, diferentes trastornos,… Por lo tanto, consideramos que trabajar la atención es algo fundamental.

En este artículo, por un lado os dejamos una serie de pautas para trabajar la atención que os resultarán muy útiles:

  • Debemos ser claros a la hora de explicar la tarea que vamos a realizar.
  • El lenguaje debe ser preciso y concreto.
  • Debemos ser constantes en nuestro trabajo y utilizar una metodología adecuada y sistematizada.
  • Una de las pautas para trabajar la atención es marcarnos siempre unos objetivos concretos.
  • Aprovechar los intereses y preferencias para favorecer la atención y concentración.
  • Que las actividades sean lúdicas y divertidas y de este modo favorecer la motivación.
  • Utilizar actividades variadas para evitar la fatiga y el aburrimiento.
  • No facilitar en exceso la tarea/actividad.
  • Aprovechar los mejores momentos, evitar dejarlo para el final puesto que los resultados no serán efectivo si el niño está fatigado.
  • Mantener en todo momento una actitud positiva y motivadora es una de las pautas para trabajar la atención más importantes.

Por otro lado, existen muchas actividades para mejorar y entrenar la atención, tantas como seamos capaces de llegar con nuestra destreza e imaginación. Aquí os dejamos unas cuantas propuestas que se pueden adaptar según la edad o las necesidades de cada niño:

  • Actividades de asociación visual: asociar, sustituir o relacionar unas imágenes con otras.
  • Actividades de percepción de diferencias: análisis de 2 o más dibujos.
  • Actividades de integración visual: completar imágenes o dibujos que están parcialmente borrados.
  • Actividades de identificación de intrusos: reconocer entre un conjunto de imágenes cuál es la que no debería estar.
  • Actividades de discriminación visual: encontrar elementos iguales a los propuestos (animales, números, letras…).
  • Actividades de seguir laberintos o seguimientos visuales: ejercitar la capacidad para seguir la dirección de las líneas.
  • Actividades de agudeza visual.
  • Actividades de figura-fondo: buscar objetos escondidos detrás de otros.
  • Actividades de atención auditiva.

Esperamos que os sean de utilidad todas estas actividades y pautas para trabajar la atención.

Andrea Botella, pedagoga y terapeuta en RED CENIT

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