La familia desempeña un papel fundamental en la prevención del consumo de drogas en niños y adolescentes. Los padres ejercen una influencia duradera sobre los valores, actitudes, hábitos, estilos de vida, creencias y comportamientos, en el modo de los hijos de enfrentarse a la vida y de relacionarse con las drogas. Es muy importante el clima familiar, la calidad de las relaciones, la comunicación padres-hijos, el apoyo emocional, la ocupación compartida del tiempo libre con aficiones comunes, la supervisión de amistades y cómo se divierten.
Entre las medidas que los padres pueden implementar para prevenir el consumo de drogas en los hijos se encuentran:
- Establecer normas familiares que ayuden a su hijo a decir “no”.
Establecer una disciplina familiar adecuada y normas claras de conducta dentro de la familia. Los hijos deben saber qué está bien y qué está mal; cuáles son las conductas que sus padres esperan de ellos y las consecuencias que se derivan del incumplimiento de las normas.
Es importante que los padres enseñen a sus hijos desde pequeños la capacidad de decir no ante ciertas situaciones y ante un ofrecimiento de consumo de drogas, a expresar sus deseos, a no hacer cosas que no quieren hacer y a ser congruentes con sus creencias, a saber diferenciar y estar con las personas que respetan sus decisiones en lugar de aquellas personas que intentan manipularles.
2. Escuchar a su hijo.
Ofrecer apoyo emocional, trato cálido y afectuoso a tus hijos, elogiándoles por sus logros y por sus conductas. Mantener una buena comunicación con ellos, conociendo sus problemas, intereses y necesidades. Es una forma de reducir el miedo y la incertidumbre frente a todos los cambios que ocurren en el cuerpo y en la mente durante la adolescencia.
3. Fomentar la realización de actividades de ocio diversas, actividades deportivas y potenciar el rendimiento académico.
Es importante conocer las actividades que realizan nuestros hijos y sus amigos: ¿Con quién van y se relacionan?, ¿A qué dedican su tiempo libre?, ¿En qué se gastan la asignación semanal?, etc.
4. Ayudar a su hijo a sentirse bien consigo mismo, reconocer sus progresos y logros.
Reconoce su potencial en lugar de señalarle constantemente sus errores. Esto no quiere decir que no lo hagamos, pero siempre desde una perspectiva de oportunidad para crecer. Evita crear expectativas sobre su futuro, forma de ser y comportamientos. Escúchale e interésate por aquello que quiera compartir con nosotros, al igual que pregúntale y hazle partícipe.
5. Demostrar una conducta y una actitud preventiva frente al consumo de drogas por parte de los padres.
Es importante que los padres sean un modelo adecuado para sus hijos.
6. Hablar con los hijos sobre las drogas y desmontar los mitos.
En ocasiones puede ser un tema difícil de tratar, pero hay que hacerlo lo antes posible. El mejor momento para hablar de este tema es cuando tu hijo hace alguna pregunta. Sin embargo, se debe aprovechar cualquier oportunidad para hacerlo. Hazle saber los peligros y el riesgo que tiene el consumo de drogas.
Reyes Martínez Borondo, Psicóloga Clínica, en Red Cenit Valencia
