Como hemos comentado en numerosas ocasiones el juego es la herramienta fundamental para el desarrollo de aprendizajes significativos en todas las áreas del desarrollo; así entonces, como estamos cerca de una época en la que nuestros héroes esperan sus más apreciados regalos de Navidad, a continuación os ofrecemos algunas alternativas para poder regalar en periodos clave de desarrollo del lenguaje.

Ya que en nuestro post anterior se remarcó la especial importancia del desarrollo del lenguaje en etapas tempranas, hemos considerado oportuno hablar de algunos juegos para desarrollar el lenguaje que podemos tener al alcance, o bien, poder comprarlos o realizarlos nosotr@s mism@s.

  • El primero es un juego muy familiar basado en las parejas o “memory”. Además de existir numerosas opciones en el mercado, es muy fácil conseguir  en Internet juegos de memory de diferentes categorías semánticas. Con sólo recortar las imágenes y pegarlas sobre un cartoncito, un tapón de garrafa, o un posa vasos de cartón, ya tienes un juego súper entretenido con el que podrás trabajar aspectos como la ampliación de vocabulario de sustantivos, acciones, opuestos, etc.; la pronunciación, tratando de segmentar las sílabas que componen cada palabra (to-ma-te); toma de turnos; pronombres (a mí, tuyo, él); control de la espera; memoria visoespacial; o atención selectiva y sostenida. Además, puedes utilizar las imágenes para trabajar categorización, clasificando las imágenes en torno al mismo campo semántico o buscando en lugar de la pareja, imágenes que pertenezcan a la misma categoría.

En segundo lugar, el clásico juego del Lince, que lo podemos encontrar desde los dos años hasta la edad adulta. Un juego de atención visual, con gran cantidad de vocabulario para desarrollar el lenguaje, turnos de juego y pronombres, control de la espera y muchas cosas más. Cada vez vas cogiendo una ficha por turnos, en la que aparece una imagen que debes localizar en el tablero. Puedes también realizar segmentación silábica como en cualquier ejercicio en el que haya que nominar. Pero además, puedes complicar un poco el juego haciendo que describa las imágenes, nombrando la categoría a la que pertenece o utilizando palabras que expresen cualidad.

Esta es la imagen del juego auténtico (hay varios niveles), pero como se ve en la segunda imagen abajo, es posible descargárselo también de Internet; al menos una versión parecida (de Logopedia dinámica y divertida).

Por otro lado, tenemos el juego del “Dobble”, donde también hay de varios niveles desde los 3 años con números y formas, hasta edades adultas. Es un juego muy divertido. Consiste en que cada jugador tiene un  bloque de cartas y debe ser muy rápido, pues si en su siguiente carta se repite una de las imágenes que hay en la carta que se queda en la mesa, debe nombrar lo más rápido posible el elemento y colocar su carta encima. El que antes se quede sin cartas, gana.

Con este juego se ayuda a desarrollar el lenguaje y el vocabulario, la atención y la velocidad de procesamiento.

Otro de los grandes recursos que no deben faltar en las casas de nuestros pequeños héroés, son los  cuentos de solapas o ventanitas o los libros de pegatinas. Hay infinidad de cuentos y libros de diferentes temáticas. Los libros son más duraderos, pero el placer de pegar las pegatinas a la vez que vamos aumentando el vocabulario les motiva bastante más. Otra opción para que duren más tiempo, podría ser plastificar todos las pegatinas y colocarles un pegamento especial o velcros que permite pegar y despegar varias veces fácilmente.

Otra opción que también puede resultar muy motivadora para pasar un rato de juego estimulando el lenguaje, los turnos, la espera, etc., son los juegos de descubrimiento táctil, juegos en los que los niñ@s usan el sentido del tacto agudizando la precisión en las dimensiones si son reales y en las formas desde su canal táctil. Hay diferentes juegos a la venta. Os dejamos dos ejemplos, tanto de objetos en dos dimensiones como en tres e incluso objetos reales.  Se necesita una telita para que no se vea nada (como en los ejemplos de más abajo).También sería interesante que  nuestros héroes tuvieran una plantilla de los objetos que hay para que pueda también apoyarse de forma visual.

Otra opción es que se pueda fabricar la caja de descubrimiento haciendo dos agujeros en una caja de cartón y colocándole una plantilla con las imágenes de los objetos que podrían estar tocando para que le resulte más fácil, y así poder adivinar que están tocando. Además, podemos emplear alguna pista descriptiva sobre su categoría, su color, la forma, e incluso el lugar dónde lo encontramos.

Otro juego que es muy interesante y divertido, es el famoso juego del “Quién es quién”,o “Quién soy yo?” al que podéis jugar todos en familia. De esta manera, se puede desarrollar la función de preguntar y describir a personas, dónde nos podemos apoyar con una lámina de rasgos caracterísiticos de personas. Hay varios niveles, desde los cuatro años hasta la edad adulta.

De nuevo, como en todos los casos que se han propuesto, se pueden encontrar también otras versiones en Internet, solo que al no poderse levantar/cerrar ventanitas, hay que tachar, por lo que se aconseja plastificar.

Por último, el juego “Quién soy” disponible en muchos formatos y desde cuatro años de edad hasta edades adultas. Se trata de un juego en el que potenciamos la memoria, el lenguaje y la socialización a través de preguntas y respuestas. Además, sólo se puede responder “SÍ o NO” a las preguntas que se realizan acerca de la tarjeta que tenemos en nuestras frente colgada en una especie de tira, y de la cual, cada uno de los participantes no puede verse la suya propia, y mediante las preguntas de los demás podrá adivinarlo. También se pueden ayudar con una especie de apoyos visuales para poder hacer preguntas por descripciones según la categoría que sea la tarjeta, (por el color, el tamaño, la forma, textura…).

 

Para concluir, nos gustaría hacer especial hincapié en que los juegos que hemos presentado son para jugarlos en familia y, si es posible, con algunos amig@s, fomentando las relaciones humanas y la interacción social. Así es como nuestros héroes aprenden el uno con el otro, y conectan fomentando los vínculos de apego y las emociones positivas en el aprendizaje, además de sentirse muy motivados porque están compartiendo el tiempo con sus seres más queridos.

Vanessa Civera, pedagoga y terapeuta en RED CENIT