Se define a los niños/as con altas capacidades intelectuales o superdotados, como aquellos que muestran una elevada capacidad de rendimiento en las áreas intelectual, creativa y/o artística. Las características psiconeurológicas, de su entorno sociocultural y de su personalidad, pueden llevar a la aparición de problemas en la esfera personal, social y académica.
Son muchos los que hoy en día todavía piensan que las altas capacidades intelectuales o la superdotación en los niños/as sólo existen cuando su elevada inteligencia les hace obtener unos resultados excepcionales a nivel académico; pero realmente esto no es así. Hay diferentes tipos de niños/as con altas capacidades intelectuales
Según Betts y Neihart, podemos encontrarnos con seis perfiles o tipos de niños con altas capacidades:
- Alto rendimiento: suele ser identificado fácilmente en los centros educativos. Son valorados positivamente por los equipos docentes porque sus altas capacidades o su superdotación, se muestran claramente en su rendimiento escolar. Suelen estar motivados hacia el aprendizaje de los contenidos escolares, haciendo que se detecten fácilmente. Pero sería un error considerar que no necesitan nada, por lo que para que no surjan problemas deben de recibir la intervención educativa como alumnado con necesidades educativas derivadas de altas capacidades intelectuales.
- Retador: se asocia con la creatividad. Pero la falta de actividades que permitan que se desarrolle su creatividad, puede llevarlos a un comportamiento rebelde e incluso desafiante ante los adultos. La intervención educativa para ser eficaz debe de ir dirigida hacia el desarrollo de la creatividad.
- Clandestino / Invisible: son niños/as con altas capacidades intelectuales que tratan de ocultar sus talentos. Les lleva a veces en la etapa de Secundaria a dificultar su identificación, y pueden presentar una baja autoestima o incluso sentir ansiedad. Todo esto se debe al conflicto entre el éxito social y el académico.
- Desertor: son niños/as con altas capacidades que suelen presentar una larga historia de bajo rendimiento escolar. Normalmente, durante la etapa de Primaria, sus altas capacidades les permiten aprobar los cursos sin esfuerzo con un rendimiento que no tiene por qué ser excepcional. Suelen encontrarse desmotivados hacia el aprendizaje escolar, por lo que requieren de una respuesta educativa, para no abandonar ya que es lo que les suele ocurrir.
- Doble excepcionalidad: son niños/as con altas capacidades, pueden además presentar otras necesidades educativas como dificultades de lectura, escritura, Trastornos del Espectro Autista, Trastorno por Déficit de Atención con o sin Hiperactividad,… Habitualmente son estás últimas necesidades educativas las que siempre priman, llegando incluso a concluirse en las evaluaciones psicopedagógicas, sólo la necesidad asociada a la dificultad, olvidando con ello las altas capacidades intelectuales. En estos niños/as, sus potencialidades y puntos fuertes han de ser considerados en la respuesta pedagógica para poder trabajar de forma armónica sus distintas capacidades y habilidades.
- Autónomo en el aprendizaje: se trata de niños/as capaces de dirigir su propio aprendizaje de forma autónoma. No obstante, este aprendizaje no siempre está asociado a los objetivos escolares, por lo que proporcionarles una intervención adecuada favorecerá el desarrollo íntegro de su personalidad.
Lo más importante es conocer el perfil concreto de cada uno de estos niños/as, para poder ofrecer una intervención que se adecue a sus verdaderas necesidades. Hay que tener en cuenta que el número de niños/as con superdotación intelectual que pasan desapercibidos es elevado. Es importante tener una historia clínica detallada, conocer cuales son los signos de alarma, que se haga uso de escalas tanto para padres como para maestros para su identificación, para que, junto a un equipo multidisciplinar, los puedan diferenciar y confirmen el diagnóstico.
Tenemos que considerar a estos niños/as como un grupo de riesgo. La temprana identificación es clave para anticipar medidas psicoeducativas y evitar posibles problemas en el ámbito personal, social y académico.
“Podemos ignorar las diferencias y suponer que todas nuestras mentes son iguales. O podemos aprovechar estas diferencias” (Howard Gardner)
Marian Sirera Conca, Pedagoga. Coordinadora Diagnósticos e Intervención en los Trastornos del Neurodesarrollo en RED CENIT Valencia
